2 de septiembre de 2025
El calendario no espera y la digitalización tampoco. Desde el 1 de enero de 2026, todas las sociedades mercantiles deberán emitir facturas a través de sistemas como Verifactu. Los autónomos, por su parte, tendrán plazo hasta el 1 de julio de 2026. La ley es clara: sin un programa certificado, las sanciones pueden ser severas, hasta 50.000 €.
Para muchas empresas esto significa reorganizar procesos, actualizar sistemas y formar al personal. Para las autoescuelas, es un cambio que va más allá de lo administrativo. Cada clase teórica, cada práctica, cada paquete de horas cuenta. Cada factura debe emitirse correctamente, registrar impuestos y plazos, y estar disponible para inspección de la Agencia Tributaria. No hay margen de error.
Adaptarse a Verifactu es más que una obligación: es una inversión en tranquilidad y profesionalidad, en modernizar la autoescuela y demostrar al alumno que cada proceso, incluso administrativo, está cuidado. Porque en un sector donde la competencia es fuerte y los tiempos apremian, contar con un sistema ágil y legal ya no es un lujo: es la diferencia entre ser competitivo o quedarse atrás.
El futuro de la facturación ya tiene fecha. Las autoescuelas que se anticipen y adopten Verifactu no solo cumplirán la ley, sino que ganarán eficiencia, confianza y espacio para crecer. La pregunta no es si adaptarse, sino cuándo empezar.
Drovify, un programa diseñado específicamente para autoescuelas y totalmente adaptado a Verifactu. Una excelente opción para gestionar tu autoescuela de la forma más simple y ágil, así como también tu facturación. Con Drovify la autoescuela puede mantener el foco en lo que realmente importa: la enseñanza y la experiencia del alumno.